sábado, 23 de agosto de 2014

Chosica y Real Maracaná

Ayer, jueves 21, visitamos Chosica, un pueblo situado a 1h al este de Lima, donde pudimos disfrutar de un clima muy distinto al del encapotado Lima. Chosica es el barrio de nuestra amiga Rosina. Cuando la ONG Deporte y Desarrollo comenzó su trabajo hace mas de 10 años todo comenzó allí. La intención inicial fue la de fomentar el deporte femenino y usarlo como herramienta para la inserción social. Se apoyó al Real Maracaná de Chosica, un equipo femenino muy humilde. Dentro de ese equipo se priorizó el apoyo para aquellas chicas más vulnerables. Entre ellas destacaban Rosina Nolasco y Jackelin Rudas. Dos chicas muy diferentes en lo externo, pero muy parecidas en sus circunstancias vitales. Ambas muy humildes, con un potencial tremendo, pero con la falta de una oportunidad para demostrarlo. Una de ellas rebelde, extrovertida, traviesa e inquieta (Rosina). La otra introvertida, parca en palabras y madura (Jackie).
La necesidad de disponer de un tiempo libre para recrearse en aquello que mas les gustaba, el fútbol,  les llevó a compartir vestuario en el Maracaná. A partir de entonces compartieron no solo vestuario sino confidencias, problemas, esperanzas y esfuerzos por sacar adelante a sus respectivas familias.
Se les ha apoyado en estos años en diferentes ámbitos pero hoy es el día en el que ambas son extraordinarias estudiantes de  arquitectura y de la carrera policial. Una de ellas universitaria y la otra opositando.
Ambas han estado en Euskadi en dos ocasiones en intercambios deportivo-culturales. Allí fue donde las componentes del club las conocimos y entablamos la fuerte relación que en estos momentos nos une.
Desde que Carlos Gurpegi estuvo en Villa el Salvador por primera vez, varios jugadores del Athletic Club les han apoyado y durante su ultima estancia han estado hospedadas y apoyadas por Óscar De Marcos.





La vivienda donde vivía Rosina con su familia en Chosica la verdad es que nos dejó impresionadas por su ubicación y por sus características. Se puede decir que es mucho más que humilde con unas condiciones complicadas para la vida en familia. Actualmente Rosina y su familia viven en un barrio de Lima.
Después de esta notable vivencia, nos dirigimos a Chaclacayo, para degustar las papas rellenas, causa y la típica bebida Inkacola que nos había preparado la madre de Jacky. La verdad es que disfrutamos de un ambiente muy agradable y para nosotras fue un tremendo orgullo poder disfrutar de la compañía de la mama de una de nuestras amigas peruanas. Por otro lado la gratitud que mostraba hacia nosotras y la ONG es enorme por el apoyo que se le ha brindado a Jackie.


Posteriormente, pusimos rumbo a Agustino y Puente Nuevo, para conocer a las chicas mas jóvenes del Real Maracaná de Chosica. Allí, entrenamos a las niñas y disfrutamos viéndolas jugar un partido contra los chicos del barrio (por cierto, ganaron ellas). Tras charlar un poquito con las jugadoras, nos dirigimos a Larcomar a cenar y a disfrutar de un merecido descanso.




No hay comentarios:

Publicar un comentario